La Conselleria de Infraestructuras y Transporte licitará dentro de este año la redacción del proyecto constructivo del nuevo vial de acceso por el norte a Moixent desde la A-35, que evitará un extenso rodeo gracias a un puente de 70 metros que salvará el río Cànyoles. El director general de Obras Públicas, Ismael Ferrer, ha presentado al alcalde, Vicente Dubal, el estudio previo, que contempla un vial de 200 metros con un presupuesto de 1,7 millones de euros.
Ferrer ha explicado que este nuevo acceso franqueará el acceso de forma directa desde la A-35 por el norte del municipio y permitirá a los vecinos evitar el rodeo de más de un kilómetro que deben dar en la actualidad para entrar por el sur.
El estudio de viabilidad que ha dado a conocer el director general de Obras Públicas en el Ayuntamiento de Moixent salva el río Cányoles con un puente y pasa por debajo de la línea férrea para conectar con la autovía. Este vial permitirá, además de un acceso directo al casco urbano, una mejor conexión a las zonas deportivas y centros dotacionales ubicados en la zona norte del término.
El documento que ha presentado Ferrer tendrá que ser concretado en el proyecto constructivo y sometido a consulta de la Confederación Hidrográfica del Júcar, que tendrá que dar el visto bueno al nuevo puente, una estructura que contará con un carril por sentido, carril bici, aceras peatonales y los elementos necesarios para asegurar su integración paisajística en el entorno.
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